Pulpo a la gallega: el emblema del sabor atlántico
Hablar de la gastronomía gallega sin mencionar el pulpo a la gallega (o pulpo a feira, como también se le conoce) es como hablar de Italia sin mencionar la pasta. Este plato no solo representa el alma culinaria de Galicia, sino que es uno de los favoritos tanto de locales como de visitantes. En Los Amigos, aunque nos gusta fusionar sabores del mundo de las calles de Beirut al corazón de Santiago, siempre reservamos un lugar muy especial para los platos que nos conectan con esta tierra. Y el pulpo, claro está, es uno de ellos.
Un clásico con nombre propio: ¿qué es el pulpo a feira?
El nombre “a feira” hace referencia a su origen popular: se servía tradicionalmente en ferias, fiestas patronales y mercados. Allí, sobre grandes mesas de madera, los “pulpeiros” (expertos en cocinar pulpo) lo preparaban con una maestría que pasaba de generación en generación.
El plato es, en esencia, una preparación simple pero contundente: pulpo cocido, cortado en rodajas y servido sobre una base de madera con sal gorda, pimentón (dulce o picante) y un generoso chorro de aceite de oliva virgen extra. A menudo se acompaña de cachelos (patatas cocidas con piel), que absorben el sabor y completan la experiencia.
Del mar al plato: historia y tradición de este manjar gallego
La relación de Galicia con el mar es profunda y ancestral. El pulpo ha sido, desde hace siglos, parte fundamental de la dieta costera. En tiempos en que la conservación de alimentos era complicada, el pulpo seco se vendía en zonas del interior gallego, lo que hizo que su preparación se popularizara más allá de las costas.
De hecho, algunas de las mejores recetas de pulpo a feira provienen de pueblos del interior como Carballiño, donde cada año se celebra la famosa Festa do Pulpo. Hoy, el plato está presente en todo el territorio gallego, y por supuesto, Santiago de Compostela es uno de los mejores lugares para disfrutarlo.
Los secretos del pulpo perfecto: cocción, corte y pimentón
No hay magia, pero sí mucha técnica detrás de un buen pulpo. El secreto está en la cocción justa: ni demasiado duro ni excesivamente blando. El pulpo debe "asustarse" antes de cocinarse, es decir, se introduce y se saca varias veces del agua hirviendo para que la piel no se desprenda.
Luego, una cocción controlada, un corte preciso en rodajas y una buena elección del pimentón (mejor si es de calidad, como el de la Vera o el de O Couto) hacen toda la diferencia. Y por supuesto, el aceite de oliva virgen extra, que aporta brillo, sabor y esa textura suave que enamora.
Pulpo, cachelos y aceite: la santísima trinidad gallega
El acompañamiento ideal para el pulpo a feira son los cachelos, esas patatas cocidas en su piel que absorben el sabor del mar y del aceite con cada bocado. Servir el pulpo sin cachelos en Galicia es casi un sacrilegio. Juntos forman una combinación que no solo es deliciosa, sino que también refleja la filosofía de la cocina gallega: producto, sencillez y respeto por la tradición.
En Los Amigos, servimos nuestro pulpo tal y como manda la tradición, pero siempre con un cuidado especial por los detalles: producto fresco, cocción justa y presentación con mimo. Porque sabemos que el verdadero lujo está en lo auténtico.
Dónde comer buen pulpo en Santiago
En Santiago de Compostela no faltan los lugares donde puedes encontrar buen pulpo. Desde bares tradicionales en el casco antiguo hasta modernos locales de tapas. Pero si buscas un sitio donde se combine tradición gallega, un ambiente acogedor y un toque de fusión internacional, entonces Los Amigos es tu lugar.
Nos encontramos en pleno corazón de Santiago, y nuestra propuesta gastronómica une lo mejor de Galicia con sabores del mundo. Aquí puedes disfrutar de un pulpo a feira clásico o dejarte sorprender por nuestras versiones con un toque personal: desde una tapa creativa con alioli suave hasta una presentación en cama de hummus para los más curiosos.
Pulpo con estilo: reinterpretaciones modernas del plato más famoso de Galicia
Aunque respetamos la receta tradicional, en Los Amigos también nos gusta experimentar. Por eso no es raro que encuentres en nuestra carta versiones del pulpo con un guiño contemporáneo: pulpo a la plancha con especias libanesas, mini tostadas de pulpo con crema de aguacate, o incluso como protagonista de una burger gourmet.
Estas reinterpretaciones no buscan sustituir al clásico, sino rendirle homenaje desde otro ángulo. Y, para los más puristas, siempre estará el tradicional, servido en plato de madera y con cachelos, como debe ser.
Más que un plato, un ritual: el pulpo como experiencia en Los Amigos
Comer pulpo en Galicia no es solo alimentarse: es vivir una experiencia, una conexión con la historia, el mar, y el alma de un pueblo. En Los Amigos, queremos que cada plato de pulpo que servimos lleve consigo ese valor. Que no sea solo un sabor, sino un recuerdo, una vivencia.
Así que ya lo sabes: si estás en Santiago y quieres probar uno de los grandes tesoros de la gastronomía gallega, el pulpo te espera. Y nosotros también.
Ven a Los Amigos y déjate conquistar por el auténtico pulpo a la gallega.
Tradición, sabor y un toque muy nuestro… ¡como debe ser!